Si reuniésemos a un grupo de personas profesionales y les preguntásemos cuáles son sus objetivos a corto y medio plazo, muchas responderían al unísono algunas de las siguientes afirmaciones:
- Crear productos innovadores.
- Fomentar la creatividad y el trabajo en equipo.
- Aprender a tomar buenas decisiones, tanto en el ámbito personal como en el laboral.
- Diferenciarme de la competencia y aportar valor al cliente.
Aparentemente, son afirmaciones que cubren áreas muy dispares que parecen no estar relacionadas, ¿verdad? Sin embargo, a pesar de los diferentes enfoques y ámbitos de actuación, todas tienen un punto en común: la necesidad de pensar de forma creativa y de innovar.
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La importancia de la innovación.
En esta línea, ya que muchas personas las mezclan, es fundamental conocer cuál es la diferencia entre “mejora continua” e “innovación”, Mientras que la “mejora continua” está vinculada a un contexto de constante revisión, la innovación o innovar implica generar cambios significativos en productos, servicios o procesos, que aporten un valor diferencial a sus usuarios; estando todo asociado a un modelo de negocio viable. “Innovar” es la palabra clave que resuena en todo proceso de negocio. Por ello, la innovación, más que una obligación, debe ser vista como un salto que todos debemos dar.
No soy creativo, no tengo buenas ideas.
Todas las personas somos creativas por naturaleza, aunque no lo creamos; pero no todas tenemos desarrollada la capacidad de tener ideas innovadoras. Por ello, “creatividad” e “innovación” no deben ser vistas como sinónimos; para conocer la diferencia entre ambas, te recomendamos leer nuestro artículo: «¿Conoces la diferencia entre “creatividad” e “innovación”?».
No obstante, que todas las personas seamos creativas, no implica que tengamos el mismo nivel de creatividad. Pero, tenemos una buena noticia: ¡Es posible trabajar esta habilidad! Para ello, es importante despojarse de una serie de mitos y poner en práctica un método de innovación, el cual supone una ayuda fundamental. En la actualidad, existen muchos métodos de innovación: Lean Startup, Lean Manufacturing… Aunque todos son buenos métodos de innovación, nuestro favorito es el método Design Thinking, también conocido como ‘Pensamiento de Diseño’.
Como explicamos en nuestra plataforma «Design Thinking en Español«, Design Thinking es un método “para generar ideas innovadoras que centra su eficacia en entender y dar solución a las necesidades reales de los usuarios”. Como indica su propia traducción al español, ‘Pensamiento de Diseño’, el concepto proviene de la forma en la que los diseñadores de producto trabajan y piensan.
Asimismo, otro de sus puntos claves es referirnos al concepto como “método Design Thinking” y no “metodología Design Thinking”. Aunque este último término está muy extendido, es erróneo. Design Thinking es un método de innovación y no una metodología, ya que este último término hace referencia a “la ciencia que estudia los métodos”. Ahora sí, podemos empezar a abordar el proceso de este método innovador.
¿Cómo es el proceso de Design Thinking?
Si realizamos una búsqueda en Google de términos claves relacionados con Design Thinking, nos sorprendería el gran volumen de búsquedas en los últimos tres meses: “Proceso Design Thinking”, “fases Design Thinking” o “ejemplos Design Thinking” son algunos de estas búsquedas.
La razón es que en los últimos años ha habido un auge de la popularidad de este método debido a su capacidad para generar, en muy poco tiempo, soluciones innovadoras. Muchas organizaciones han empezado a ver el gran potencial de este método innovador y, por ello, no han dudado en incorporarlo a su cultura empresarial.
Pero, ¿sabrías explicar su proceso ? A continuación, te lo presentamos.
Historia del método Design Thinking.
Previamente a profundizar en el proceso de este innovador método, es importante hacer un pequeño paréntesis y hablar de su historia. Originalmente, el concepto Design Thinking fue planteado de forma teórica a partir de la década de los años 70 en la Universidad de Stanford en California, Estados Unidos, por Tom Kelley y otros colegas. No obstante, era un planteamiento puramente teórico; su primera aplicación con fines lucrativos la realizó IDEO, consultora especializada en innovación y diseño fundada por su hermano, David Kelley: creadores del primer “Mouse” para Apple. En ambos casos, Kelley llegó a estas soluciones innovadoras utilizando el método Design Thinking.
Si bien es cierto que David Kelley es uno de los artífices de los primeros pasos del método, es a Tim Brown, actual CEO de la consultora IDEO, a quien se le atribuye, en 2008, el primer uso del término “Design Thinking” haciendo referencia a este método de innovación; hasta entonces, era conocido como “The deep dive” o “Inmersión Profunda” en inglés. Para Brown, el Design Thinking es:
Una disciplina que usa la sensibilidad y métodos de los diseñadores para hacer coincidir las necesidades de las personas con lo que es tecnológicamente factible y con lo que una estrategia viable de negocios puede convertir en valor para el cliente, así como en una gran oportunidad para el mercado.
Proceso y fases Design Thinking.
El proceso del método Design Thinking se compone de cinco etapas:
- Fase de Empatía
- Fase de Definición
- Fase de Ideación
- Fase de Prototipado
- Fase de Testeo
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Fase de empatía
Consiste en conocer las necesidades de los usuarios implicados en la solución que estamos desarrollando, para producir soluciones consecuentes con la realidad observada. Es fundamental dejar a un margen ideas previas preestablecidas y convertirlas en hipótesis que contrastaremos.
Fase de definición
Obtenida la información y contrastado las hipótesis, analizamos exhaustivamente y reflexionamos sobre las conclusiones a las que se ha llegado. Es crucial descartar y quedarnos únicamente con lo que aporte valor.
Fase de ideación
Generamos un sinfín de ideas mediante la puesta en duda del Status Quo. No debemos quedarnos con la primera idea; de hecho, las alternativas extravagantes pueden ser las que mejores resultados obtengan.
Fase de prototipado
Convertimos en realidad las opciones que se nos han ocurrido a través de la ideación de prototipos. Realizar prototipos es una técnica de gran utilidad para poder visualizar las mejores ideas y poder implementarlas.
Fase de testeo
Testeamos el prototipo con los usuarios implicados en la solución desarrollada. Ello nos ayuda a identificar áreas de mejora, conocer el aporte de valor y llegar a la solución final que habíamos ideado.
¿Para qué sirve el Design Thinking? En consecuencia, ¿quiénes lo utilizan?
Características principales del método Design Thinking
La puesta en práctica del Pensamiento de Diseño es, cada vez, algo que debe ser practicado e interiorizado tanto por estudiantes, como por personas que acaban de iniciar su carrera profesional, o profesionales en activo. En definitiva, todo el mundo. Aunque en las empresas existe un gran interés en formar en Pensamiento de diseño a personas con perfiles de responsabilidad media y/o alta, debido a sus diversas características y las habilidades que potencia.
Algunos de los beneficios más significativos que puede implicar utilizar este método innovador, tanto en el ámbito profesional como en el personal, son los siguientes:
- Cultura de la innovación y creatividad.
- Observación, análisis crítico y empatía.
- Potencia el trabajo en equipo.
- Acelera el ciclo de desarrollo de nuevas soluciones.
- Reduce costes.
¿Quiénes utilizan el Design Thinking?
El método Design Thinking se encuentra en la base de las estrategias de empresas exitosas y referentes a nivel mundial. ¿Quién no ha escuchado hablar de la estrategia de Netflix, la plataforma streaming líder?, ¿o de los productos innovadores de Apple? A pesar de sus diferentes sectores de actuación, ambas se han basado en el Pensamiento de Diseño para alcanzar el éxito y posicionarse como líderes.
En nuestro caso, desde el equipo de Dinngo siempre usamos Design Thinking, tanto en nuestros proyectos de consultoría para clientes externos, como en nuestros proyectos de innovación internos. Por ello, aplicamos Design Thinking para crear Design Thinking en Español, o también Dinngo Lab, nuestra plataforma de formación online en la que ofrecemos conocimiento sobre métodos de innovación, actualmente integrada en Design Thinking en Español, para todas aquellas personas que deseen aprender a innovar: técnicas de innocación, materiales para innovar y itinerarios de Design Thinking, certificados por Design Thinking en Español.
Además, como comentábamos anteriormente, en Dinngo tenemos una larga experiencia trabajando con este método diariamente, tanto en las formaciones in company que ofrecemos, colaboraciones para innovar en instituciones educativas o en nuestros proyectos de consultoría en innovación. Poniendo en práctica este método hemos conseguido grandes éxitos locales, nacionales e internacionales: crear departamentos de innovación en empresas existentes, nuevos equipos y líneas de negocio, mejorar procesos internos, entre otros. En este breve video te contamos un poco más acerca de algunos de nuestros casos de éxito:
A pesar de los grandes beneficios de aplicar el Pensamiento de Diseño en el campo profesional, se trata de un método que puede aplicarse también en el ámbito personal. Tomar decisiones personales, aprender a resolver problemas de forma creativa y con espíritu crítico-constructivo o trabajar las conocidas habilidades blandas (soft skills) son algunos de los aspectos en los que integrar el método Design Thinking puede ayudarte a florecer y desarrollarte como persona. Las posibilidades de aplicación son muchísimas.
¿Qué se necesita para llevar a cabo un proceso de Design Thinking?
Para comenzar a poner en práctica el método Design Thinking, es muy importante organizar una serie de puntos claves:
Los materiales
En el proceso Design Thinking se utilizan materiales muy sencillos y que están a disposición de todas las personas. Principalmente, necesitarás rotuladores de colores, hojas de papel, notas adhesivas y algunos materiales básicos para prototipar. Estas serán tus herramientas para llevar a cabo las técnicas de innovación del Design Thinking, que favorecen tanto la comunicación visual como el pensamiento analítico, fundamentales en el método.
En Dinngo, además, tenemos nuestros propios materiales para innovar, disponibles para todo el mundo en nuestra tienda online. Siendo, nuestro producto estrella, nuestras barajas de cartas con técnicas del método. Gracias a ellas, muchas personas y entidades están planificando y desarrollando sus proyectos Design Thinking con mayor facilidad.
El espacio
Aunque también se desarrollarán técnicas en el exterior, muchas necesitarán un espacio de trabajo. Debes buscar un espacio luminoso y lo suficientemente amplio para trabajar de diferentes formas: en torno a una mesa, con pizarras o paredes libres para pegar la información e ideas que irás generando. Además de estas características, lo ideal es que el espacio te inspire y te haga sentir con un buen estado anímico. Un espacio de estas características motiva la innovación.
El equipo
Aunque pueden ocurrir excepciones, una de las principales claves del Pensamiento de Diseño es trabajar en equipo. Y, cuanto más diverso sea, mejor. Eso nos garantizará la diversidad de perspectivas, conocimientos, experiencias y enfoques a la hora de abordar las técnicas. Sin embargo, es fundamental que, dentro de este grupo, haya una persona que tenga conocimiento sobre el método y pueda guiar a las demás personas durante el proceso. A pesar de que es importante trabajar en equipo, esto no significa que el número de personas del mismo sea inalterable; por ejemplo, durante fases concretas pueden sumarse algunas más para prestarnos apoyo.
La actitud
El último elemento, pero no por ello el menos importante, es la actitud. Al trabajar con este método innovador es fundamental trabajar la actitud denominada “Actitud del Diseñador”; es decir, ser personas curiosas y observadoras (entre otras). Debemos ser personas empáticas, tanto con las demás personas como con sus circunstancias; ser capaces de cuestionarnos el status quo y no abordar la situación con prejuicios o asunciones; ser personas optimistas y positivas; perder el miedo a equivocarnos y, al contrario, ver los errores como oportunidades. Adoptar la mentalidad de un diseñador.
¿Qué tal, ya te has enamorado del Pensamiento de Diseño? Nosotras podemos ayudarte a liderar un proyecto de Design Thinking de principio a fin, a través de sus técnicas fundamentales y con el acompañamiento de un equipo experto de consultoría de innovación. Puedes aprender los fundamentos de este método de innovación a través de nuestros Itinerarios de Design Thinking e innovación. ¡Inscríbete ya para empezar a innovar! Y, por supuesto, puedes remitirnos tus preguntas a hola@dinngo.es o a través de nuestra página de contacto en Dinngo.
